3
Era mediado de abril, las calles, los jardines y
parques invadidos de colores llamativos y el cantar de las aves indicaban que
la primavera había llegado.
El tiempo había pasado demasiado rápido, tanto que ya
nos habíamos graduado y dentro de algunas semanas ingresaríamos a la
universidad.
Durante este tiempo no había hablado con Yeol acerca
de mis sentimientos por él, primero por el hecho de que sentía vergüenza de
confesarme y, segundo porque hacía tiempo que él me había confesado sus
sentimientos y luego de aquello no volvimos a tocar ese tema. Soy sincero,
tenía un vagó sentimiento de que en SungYeol ya no habitaba ningún tipo de
sentimiento por mí.
Luego de terminar nuestro recorrido por los distintos
sectores de la universidad decidimos ir a almorzar algo, debido a que era
pasado el mediodía y aun no habíamos comido.
Caminamos algunas calles, luego de la salida de la
universidad, hasta que logramos visualizar un puesto de comida rápida.
-Ven Myung- Yeol tomo de manera brusca mi muñeca,
llevándome casi a la fuerza al establecimiento.
Por más que de alguna manera no fuera romántico, yo
logre sentirme tan bien al tener a SungYeol una vez más cerca de mí.
<<Hace tanto tiempo que no te sentía tan cerca>>. SungYeol apretó
con un poco más de fuerza el agarre, llamando mi atención.
Para cuando reaccione ya estábamos dentro del local,
con el dependiente frente a nosotros esperando para digitar nuestra orden.
-¿Myung que deseas ordenar?- Preguntó alegre,
denotando una enorme sonrisa en su rostro.
Solo pedimos unas hamburguesas y dos Coca-Cola para
llevar y salimos del establecimiento. Recorrimos solo algunas calles hasta
llegar a un parque repleto de vida. Árboles, flores, de diversos colores y
tamaños, y hasta algunos niños con sus padres, al igual que jóvenes.
Nos ubicamos bajo un enorme árbol, el cual nos cubría
de los rayos de sol que comenzaban a ser
algo molestos.
Me senté sobre el césped, dejando nuestras bebidas a
un lado de mi cuerpo y mire a Yeol, esperando que hiciera lo mismo. Unos
segundos más tarde SungYeol se acomodaba a mi lado, extrayendo de la bolsa de
papel dos pequeñas cajas, que contenían nuestro almuerzo. Me entrego mi
almuerzo y prosiguió por abril el suyo y comenzar a comer. Yo solo opte por
beber un poco de gaseosa y mirar a mi futuro compañero de departamento, claro
había olvidado que a partir de la semana próxima viviríamos juntos.
Me perdí tanto en sus facciones, en su rostro, que no
llegue a percatarme que Lee también me observaba con una amplia sonrisa.
-Dime Myung ¿Qué es lo que tengo en mi rostro que
tanto llama tu atención?-Pregunto pícaro.
Mordí mi labio inferior, preguntándome si SungYeol
sabía, o tenía algún conocimiento acerca de mis sentimientos por él, o bien lo
que estaba haciendo era solo un juego.
<<Oh vamos MyungSoo, eres tan obvio>>
Maldita mi conciencia. Desde cuando habla por sí sola, desde cuando era tan
malditamente sincera.
No sabía que responder, tan solo mi cabeza no creaba
ningún tipo de respuesta concreta ni algo creíble. En momentos como estos lo
único que podía hacer era evitar la maldita pregunta y comer como si no hubiera
un mañana, y así mismo lo hice. Saque de su empaque la hamburguesa y comí,
fingiendo no haber oído su pregunta.
Decidí que ya era suficiente cuando mi boca se llenó y
mi estómago se negó a recibir más comida.
Levanté cauteloso mi rostro averiguando si SungYeol
aún me observaba, lamentablemente y para mi mala suerte aun lo hacía. Traté de
hacer un mero intentó de ignorancia a su inquietante mirada, terminando de
ingerir la comida que estaba dentro de mi boca y prosiguiendo a tomar la
botella, que se encontraba depositada en el césped. Pero al momento de coger el
objeto, mi mano se topó con la de SungYeol.
Yeol sujeto sin cuidado mi mano tironeando con fuerza
de ella, para así poder acercarme a él. Caí de espalda, golpeando mi cabeza con
sus piernas.
Nos encontrábamos tan cerca el uno del otro, que podía
sentir su corazón palpitar, su respiración tranquila y su mirada potente en mi rostro.
SungYeol ya había soltado mi mano, aun así no podía
alejarme de él debido a que me sostenía con uno de sus brazos mis hombros y al
otro lo paso sobre mi vientre, sujetando firme mi cintura.
La cercanía era demasiada y en momentos como estos no
podía evitar sentirme nervioso.
-MyungSoo no respondiste mi pregunta- Dijo abrupto.
Sonrío
Había olvidado que nos encontrábamos en un lugar
público y que los alrededores estaban repletos de personas.
Miré a un costado observe como algunas de las familias
o parejas que se encontraban cerca nos examinaban curiosos o algunos con
fastidio.
-¿Myung sucede algo?
No respondí, continúe observando a los individuos que
nos miraban. <<Parecen idiotas.>> Era molesto el hecho de que
tantas personas nos observaran, como si se tratara de algo extraño, como si lo
que vieran fuera un tema “TABÚ”, y era más que claro que no lo era, no en la
época en la que vivimos. <<La estupidez humana es sorprendente>>
No llegue a sentir el movimiento de mi amigo, aún
menos el momento en que tomo mi cara con su mano, la cual hace un tiempo atrás
tenías sobre mi cintura, para que lo mirara.
Su rostro estaba demasiado cerca del mío.
Lo mire, tímido, a los ojos, aquellos que parecían
querer perforarme de los profundos que eran.
Oí una leve carcajada.- ¿Porque te sonrojas?
No lo había notado, ni siquiera sentí el ardor en mi
rostro.
Mordí nervioso mi labio inferior. <<Basta o
notara tus sentimientos por él>> Ya era algo imposible poder ocultarlos.
Cerré mis ojos tratando de perder contacto, aunque sea
unos segundos, con su vista.
-¿Porque...?- Su corta e inentendible pregunta, me
hizo volver a abrir mis ojos para poder verlo. Ahora Yeol miraba hacia arriba,
su mirada se mantenía perdida en aquellas hojas verdes, que brillaban a causa
de la luz que irradiaba el sol.- ¿Porque a pesar del tiempo no logro olvidarte?
Aquellas palabras me tomaran por sorpresa, no creí que
llegara a decir aquello, ni siquiera pensaba que en él aun albergaba algún tipo
de sentimientos por mí. Pero reconozco que por más sorprendido que estuviera,
su declaración me lleno de esperanzas y alegría.
-Tan solo no puedo...- Dijo para finalizar.
Sonreí como idiota- Eso es bueno.
Para cuando me di cuenta de lo que acababa de decir,
ya era demasiado tarde. Yeol en teoría me ataco con su mirada inquisitiva.
-Explícate MyungSoo, ¿Porque está bien?
¿Qué carajos se suponía que debía decir ahora? ¿Cómo
demonios se me ocurrió decirlo en vos alta? ¿Y ahora que se suponía que debía
decir?
-MyungSoo explícate- No sabía si Yeol estaba muy
ansioso por escuchar la respuesta o bien estaba molesto. <<No lo
sé>> - ¡MYUNGSOO!
Me sobresalte al escuchar el tono de voz que había
utilizado.
<<Es el momento, debes decirle lo que
sientes>> No sabía si hacerle caso a mi conciencia, temía de lo que
llegara a decir. <<Vamos Myung es tu momento>> Si lo pensaba mejor
mi conciencia tenía razón, este era el momento. Era casi imposible que
terminara rechazado. NO, era imposible, porque si mis oídos no escucharon mal
él acababa de decir que aún no podía olvidarme.
Trague saliva, tome aire y trate de no apartar mi
vista de los ojos de Yeol.
Aun me encontraba recostado en las piernas de mi
amigo, a estas alturas bajo mi propia voluntad, debido a que SungYeol hace
tiempo que había dejado de ejercer algún tipo de fuerza en mi cuerpo, solo
manteniendo su mano derecha sobre mi cabello, en un intento de caricia.
Lleve mis manos a mi vientre y las entrelace.
-Yeol... yo... tú...-No sabía por dónde comenzar.
-Si hablas de esa manera no lograre entenderte.- Dijo alegre.
Mis nervios me dominaban por completo, no sabía por
dónde empezar mi declaración.
SungYeol llevo su mano izquierda hasta donde se
encontraban las mías, posándola sobre ellas.
-Dilo-Susurró-Confía en mí.
Respire profundo y cerré mis ojos, tal vez las
palabras fluirían si no lo veía a la cara.
-Como decirlo... No sé por dónde comenzar- Dije
nervioso. -Hace algunos meses atrás comencé a sentir algo, demasiado fuerte, al
principio fue inexplicable y difícil de asimilar. Al comienzo creí que solo era
una confusión, por causa de tus palabras, luego trate de convencerme que se
trataba de cariño. Pero... más tarde comprendí que por más palabras que me
dijera la situación no cambiaría y solo me quedaba una opción... aceptar la
realidad.
-Y... ¿Cuál es la realidad?
Su pregunta me tomo desapercibido, no imagine que
luego de mi relato preguntara aquello, es más llegue a pensar que él ya
comprendía, o entendía a lo que me refería.
<<Se más preciso MyungSoo>> ¿Más preciso?
Abrí mis ojos, encontrándome con el rostro de Yeol, en
primera plana. << ¿Ser más específico?>> Solté mis manos, llevando
mi palma derecha hasta donde se encontraba la suya, para así entrelazar
nuestras manos...
SungYeol sonrió.
Inhale y exhale repetidas veces, soltando suspiros de
por medio, hasta que logre tranquilizarme, de alguna manera.
-La realidad era simple...- Y el momento había
llegado, jamás creí que hoy fuera el día en el que confesaría mis sentimientos
a mi mejor amigo, ni siquiera pensaba en algún momento decirlos, pero el día
llego sin previo aviso... Nunca lo imagine.- Me había enamorado... de ti. En
realidad aun lo estoy.
...
...
Las horas transcurrieron demasiado rápido, o al menos
así fue a mí parecer.
Luego de mi inesperada confesión continuamos nuestro
almuerzo, claro con algunas palabras de por medio, nada relacionado a nuestros
sentimientos. No me sentí decepcionado ni mal por ello, porque sabía que Yeol
no hablaba de ello solo para no incomodar o tensar el ambiente, demasiado había
sido en el momento de mi declaración.
Ya había anochecido, las farolas de las calles
alumbraban nuestro recorrido, con su pintoresca luz blanca.
Nos encontrábamos circulando una de las avenidas
cercanas a mi hogar, uno al lado del otro sin pronunciar palabra alguna, ni
mirarnos, solo caminando. SungYeol miraba hacia algún punto fijo en la calle,
como analizando lo que había delante de él, mientras tanto yo observaba el
cielo algo turbio, por las nubes grisáceas que hicieron aparición poco después
del atardecer. La noche aún era cálida, pero parecía que llovería pronto.
-Parece que lloverá- Pronuncio en un leve
susurro.-Sera mejor que nos apresuremos.
Menciono por ultimo antes de sujetar con fuerza mi
mano y caminar rápido.
Quise creer o
suponer que era solo una excusa para que de alguna manera permaneciéramos más
juntos, físicamente. Parecía que corríamos por la velocidad en la que
avanzábamos por la acera.
Mientras transitábamos con pasos ligeros, la lluvia
comenzó a caer, unas cuantas gotas cayeron sobre mi frente, otras sobre mis
brazos, así continuaron cayendo hasta que termine por mojarme casi por
completo.
Comenzamos a detener nuestros pasos cuando notamos que
por más que corriéramos ya no habría escapatoria, además de que ya estábamos
empapados.
Yeol volteo a mirarme con una enorme sonrisa en sus
labios. Sonrisa que demostraba alegría, entusiasmo, felicidad y miles de
sentimientos que si los nombraba no terminaría jamás. Le sonreí también.
Dio unos cortos pasos para acercarse a mí, la
distancia era poca, aun así necesitaba hacer unos dos o tres pasos más para que
estuviera completamente cerca de mí. Así lo hizo, solo dos pasos y SungYeol se
detenía frente de mí, inspeccionándome con la mirada. Poso sus ojos en mis
pies, subió desde mi torso hasta llegar a mi ojos, los observo unos cortos
segundos, y volvió a bajar su vista. No sé qué fue lo que vio, solo pude
percibir su duda, la duda que sus ojos emitían.
Por algún motivo que desconocía, sentí inquietud,
nerviosismo, en mi interior. Era como una alerta que me dieron mis sentidos,
suponía algo estaba por venir.
Poso de manera suave su mano izquierda sobre mi
mejilla. Volvió a levantar su vista, observando mis ojos, dibujándose en los
suyos inseguridad y duda.
Comenzó a acercar su rostro al mío, tan lento,
pausadamente, que parecía pasar una eternidad.
Si mis sentidos y conclusiones no eran fallidos creía
saber que trataba de hacer y juraba lo esperaba con tanta emoción.
-Hazlo...-Pronuncie impaciente, esperando la acción de
mi amigo.
SungYeol me contemplo asombrado. Sus ojos permanecían
abiertos de par en par, tan inmensamente que logro producir en mí una sonora
carcajada, la cual no duro demasiado, ya que Yeol se encargó de callarla con
aquella acción tan esperada, pero que resulto ser inesperada.
No esperaba que lo hiciera de esa manera, tampoco en
ese momento, aun así eso no le quito el encanto y el amor con el que se
producía el acto.
Se sentía tan bien estar de esa forma. Poder sentir el
sabor único de sus labios. Sentir sus labios acompasarse a los míos, en un
compás tan singular, como si de una danza que únicamente él y yo conocíamos se
tratara.
De apoco aquel contacto se fue tornando más potente,
algo que nos permitía demostrar nuestros sentimientos, todos aquellos
sentimientos que por tanto tiempo ocultamos el uno del otro.
Mi mano con cuidado se soltó de la suya, para ascender
por su cuerpo y envolverse en su cuello, mientras que la otra la aferraba en su
espalda.
Yeol aún mantenía su palma izquierda en mi mejilla, en
un contacto poco perceptible.
Sonreí para mis adentros. Los sentimientos que vivía
en ese momento nunca los olvidaría, porque nunca antes había podido sentir
tantas sensaciones juntas.
...
...
Cada vez que recordaba aquel momento, aquel día,
lograba volver a sonreír y sentir aquellas sensaciones que marcaron mi ser.
Siempre que su recuerdo me dolía, siempre que
extrañaba su presencia, recordaba nuestro primer beso, aunque eso significara
ser un masoquista conmigo mismo, porque el anhelo se hacía más grande, aun así
aquello también lograba hacerme sentir bien. Recordar los tiempos vividos a su
lado me reconfortaba.
------------------------------------------------------------------------------------------------
Que tal como va???
Mmmm, mi hermana y ustedes me mataran por tardar en subir este cap jejeje perdon me olvidaba y no tengo mucho tiempo jejjee... Pero bueno aqui esta... Hagamos fiesta XD j
En Fin yo aun no lo leí, solo lo subi, y en los proximos días subire el siguiente... Recuerden que no soy quien lo escribio, si halagan que sea a mi hermana jejeje, que por cierto escribio un hermoso drabbe del WooGyu, je y la estoy apurando para que lo corrija asi lo subo wiiiii... de verdad me encanto.
Bueno, gracias por leer, y por fa, no me gusta rogar comentarios, pero sirven para saber si lo que hacemos lo hacemos bien o mal.
Nos estamos leyendo.